Esto hay que pararlo, creo que empieza a palpitar en mis venas el desbocado espíritu del Fin de Año con todo su fulgor. Como alternativa a más felicitaciones físicas que no voy a poder soportar (besitos y otras manifestaciones de felicidad absurda por el año nuevo) te comunico que me encierro en casa a partir de ya.
La
alienación es inminente. Sé que voy a vivir momentos de difícil
calificación, que seré testigo de una programación vergonzante que me
hará dudar de mi salud mental y que al final disfrutaré como posesa de
la infame regurgitación televisiva. Mira, no sé si comerme las uvas con
Ramontxu o con la Pedroche pero te cuento un secreto: me voy a abandonar
a la gala indecente de todos los años con la esperanza de que la
Primera recurra al sórdido revoltijo de caspa pero se supere a sí misma.
Genial. Venga, dame un me gustita. Sé que te ha encantado.
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Canción del Great Bubby show in Don Pepe Hotel, de la película El turismo es un gran invento.